Los bancos pueden salvar el mundo desbloqueando la financiación climática

Anticipamos un cambio fundamental en cómo se desplegará la financiación climática1 desde ahora hasta el final de la década para movilizar la inversión en la descarbonización de edificios a gran escala, mientras se crean beneficios económicos. Tenemos la mayoría de los ingredientes para ofrecer edificios bajos en carbono y resistentes al clima: los compromisos, las herramientas, la tecnología, la experiencia y los marcos regulatorios; el eslabón perdido es cómo financiamos la transición
 

Puntos clave:

• La emisión de deuda sostenible está muy por debajo de los niveles necesarios para alinear los edificios con las vías hacia cero emisiones netas: en los últimos cinco años, solo el 9% de la emisión total de deuda inmobiliaria se etiquetó como deuda sostenible.

• Los prestamistas están subestimando los riesgos para el valor asociados con la obsolescencia y el rendimiento futuro de los edificios. En medio de crecientes riesgos climáticos, se necesita inversión ahora no solo para mantener el valor, sino para crearlo. Estimamos que, en el Norte Global, los propietarios de CRE necesitarán financiación de deuda de casi 2 billones de dólares en las próximas dos décadas para renovar propiedades de oficinas y cerrar la brecha de oferta.

• Los prestamistas necesitarán cerrar la brecha de información. Las capacidades de modelado avanzadas pueden ofrecer a los bancos y prestamistas una ventaja estratégica.

• Los gobiernos tienen un papel más importante que desempeñar proporcionando mecanismos de financiación directa, cultivando asociaciones público-privadas y creando una infraestructura política transparente.